¿Cuándo y por qué hay que cambiar el filtro de aire del coche?
El filtro de aire de un coche es una parte esencial del sistema de admisión de aire, encargado de filtrar el aire que llega al motor para que allí se realice una correcta combustión. Cambiar el filtro de aire del coche evita que impurezas como polvo, polen, gases o insectos lleguen al motor, evitando así averías importantes.
El filtro de aire del coche debe ser cambiado regularmente según las recomendaciones del fabricante del vehículo. Por lo general, se recomienda cambiarlo cada 15.000 kilómetros o cada año, dependiendo de las condiciones de conducción y del entorno en el que se use el vehículo. Sin embargo, si conduces en áreas polvorientas o sucias, es posible que necesites cambiarlo con más frecuencia, algo que en las revisiones periódicas te dirá tu taller de confianza.
¿Para qué sirve el filtro del vehículo?
El filtro de aire del vehículo sirve para eliminar las impurezas presentes en el aire que entra al motor. Estas impurezas pueden incluir polvo, polen, suciedad, insectos, partículas de goma y otras partículas pequeñas que podrían dañar el motor si inllegan al sistema de combustión.
Al atrapar estas impurezas, el filtro de aire asegura que el aire que llega al motor esté limpio y libre de contaminantes, lo que contribuye a un mejor rendimiento del motor y una combustión más eficiente.
¿Por qué es importante el filtro del aire?

Es importante cambiar el filtro de aire del vehículo de manera regular porque un filtro sucio u obstruido puede afectar negativamente el rendimiento del motor y la eficiencia del combustible. Cuando el filtro está sucio, restringe el flujo de aire hacia el motor, lo que puede reducir la potencia del motor, disminuir la aceleración y aumentar el consumo de combustible.
Además, un filtro obstruido puede provocar un exceso de desgaste en otras partes del motor, lo que puede hacer que tengamos que realizar reparaciones costosas a largo plazo. Es por eso que, desde nuestra experiencia, te recomendamos cambiar el filtro de aire de manera periódica, ya que es una parte crucial del mantenimiento preventivo del vehículo y ayuda a garantizar un funcionamiento óptimo del motor y una mayor vida útil del coche.
Aquí tienes algunas claves para saber si el filtro de aire del coche está en mal estado:
Un filtro de aire obstruido puede reducir el flujo de aire hacia el motor, lo que puede reduce el rendimiento del motor.
Si notas que tu coche tiene una aceleración más lenta o menos potencia de lo habitual, podría ser una señal de que el filtro de aire está sucio o en mal estado.
Un filtro de aire en mal estado puede causar que el motor trabaje más para obtener la cantidad adecuada de aire, lo que puede llevar a un aumento en el consumo de combustible.
Si observas que tu coche está consumiendo más de lo habitual sin una razón aparente, podría ser un indicio de un filtro de aire sucio.
Un filtro de aire en mal estado puede provocar que el motor produzca ruidos inusuales, como pequeños golpes o rugidos, debido a la restricción del flujo de aire. Presta atención a cualquier cambio en los sonidos normales del motor, ya que podría ser una indicación de un problema con el filtro de aire.
- Si inspeccionas el filtro de aire y notas una acumulación significativa de suciedad, polvo u otros residuos, es una señal inequívoca de que debe ser reemplazado. Además, si ves que el filtro está roto o dañado de alguna manera, también es necesario reemplazarlo de inmediato.
Algunos coches están equipados con sensores que pueden detectar problemas con el flujo de aire o el rendimiento del motor. Si se enciende una luz de advertencia en el tablero, como la luz de «revisar motor» o la luz de «filtro de aire», acude al taller para una inspección adecuada del filtro de aire.
Estas son algunas claves importantes para identificar si el filtro de aire del coche está en mal estado. Si observas alguno de estos signos, es recomendable que acudas a tu taller de confianza para realizar un cambio en el filtro de aire, para así mantener el buen funcionamiento de tu vehículo.